lunes, 9 de abril de 2012

Y me quedé con ganas de más.

De más miradas, de más sonrisas, de más momentos juntos.
Despertarme con ese vacío en el pecho, con mi memoria dando vueltas como una loca, recapitulando cada segundo que compartimos.
Se desvaneció el tiempo, rápido, voló entre nosotros. Paseos, caricias y palabras que ahora ya no me encajan.
Dejaste un buen sabor de boca en mí, demasiado bueno.
Maldito seas, ¿no te das cuenta de que ahora ya no puedo existir sin esos recuerdos?
Los necesito, son parte de mí, van tatuados en mi piel, en cada poro.
No dejan de estallar en mi cabeza, uno tras otro, creando un barullo, del que tú y solamente tú, eres el culpable.
No me siento orgullosa, he caído, y te recuerdo, querido, que yo nunca caigo, pero no sé que pasa contigo. No sé que me has hecho, pero me he resbalado poco a poco, con tu ayuda, hacia un paraíso inmenso al que no sé llegar sin ti.
Del cual me sacaste de un momento a otro.
Y llámame egoista, pero me quedé con ganas de más.

Dann

No hay comentarios:

Publicar un comentario