domingo, 22 de enero de 2012

Sentidos

A flor de piel, escapándose por todos y cada uno de los poros de mi cuerpo.
Siento tu respiración justo detrás de mi oreja, ahí, en mi nuca, agarrándome de las manos y balanceándose conmigo. En la planta de mis pies siento la arena, cada vez más fría, pero apenas me importa.
No veo nada y sin embargo tengo la sensación de que no lo necesito, el olor de la la venda que me has puesto en los ojos huele a ti, no entiendo qué quieres enseñarme, pero el simple hecho de ser algo desconocido, hace que me deje llevar sin importar el resultado.
Tu cuerpo roza el mío despacio, no dejo de preguntar dónde se supone que vamos, pero tú solo te ríes. Bonita forma de dar respuesta a mis preguntas.
No temo, sé que estoy contigo y que nada malo va a pasar... Estás ahí, justo donde yo quiero que estés.
Ahora ya no hay arena, ahora siento el agua fría y sé, por el olor, que estamos en el mar.
Poco a poco me destapas los ojos, yo solo puedo abrirlos lentamente, la luz me ciega, pero en el momento en el que consigo ser cociente de donde estoy, una sonrisa se dibuja en mi cara.
Te colocas justo en frente de mí, mirándome con esa mirada profunda que me hace perder la noción del tiempo y tu sonrisa burlona. Y me doy cuenta de lo realmente importante que eres y del gran papel que juegas en todo esto.

De que sin ti, las cosas no tendrían el significado que ahora tienen.















Dann

1 comentario:

  1. dios... cuando lo he leido se me han puesto los pelos de punta de satisfación.
    Lo cierto es que es muy bello tener a alguien a quien amar.
    y también me encanta el poder q en estos casos los sentidos llegan a tener ^^
    me a gustado mucho, gracias
    :)

    ResponderEliminar